El experimento fue realizado por el psicólogo Stanley Milgram todo esto a raíz del juicio que se le hizo a Adolf Eichmann por crímenes de guerra, pero ¿Quién era el?, pues era nada más y nada menos que un teniente coronel de la SS Nazi, y uno de los principales ejecutores de judíos en los campos de concentración, el al igual que muchos otros líderes nazis enjuiciados argumentaban que solo seguían ordenes de autoridades más importantes dentro de su régimen.
Este argumento, que para muchos no era más que una simple excusa, sembró una gran duda en Milgram, pues el considero que se tenía que investigar más a fondo si podría ser que gente "normal" estaría dispuesta a obedecer órdenes de una autoridad aun cuando estas pudieran entrar en conflicto con su conciencia.
Para este experimento se contrató a gente "normal" diciéndole que era un experimento de memoria y aprendizaje, en la actualidad y también en esa época, se considera que fue algo inmoral, pues se tiene prohibido engañar a las personas con las que realizas los experimentos, aunque en lo personal creo que para obtener grandes respuestas y logros se necesitan hacer grandes sacrificios, inclusive cuando moralmente no este del todo correcto.
Una vez contratada la gente el experimento consistió en que el voluntario (persona contratada) haría el rol de maestro y estaría encargado de dar descargas eléctricas a un alumno (cómplice del experimentador) cada que este se equivocará al contestar una pregunta, la descarga comenzó en 15 voltios y fue incrementándose de 15 en 15 conforme se iba equivocando hasta llegar a 450 voltios que representaba la descarga máxima, estos dos sujetos estarían en dos cuartos distintos separados por una ventana, en el cuarto donde estaba el maestro también estaría el experimentador que sería la figura de autoridad que impulsaría y hasta cierto punto presionaría al maestro a castigar al alumno, sin importar el dolor y las suplicas que este hiciera, cabe aclarar que el alumno en realidad no sufría descargas eléctricas, cuestión que desconocía el maestro.
Conforme el maestro se resistía a aplicar las descargas el experimentador aumentaba la intensidad en las órdenes que iban desde: "Continúe, por favor" hasta "Usted no tiene opción alguna, debe continuar" orden que de ser rechazada pondría fin al experimento.
Milgram realizó una encuesta previa a psicólogos y gente común en la cual la mayoría creía que los maestros se mantendrían en un rango de castigo de 135 voltios y que solo algunos sádicos llegarían a la descarga máxima, esta encuesta fue claramente superada en los resultados finales al mostrar que el 65% de las personas llegó a la descarga máxima y que ninguna persona se detuvo antes de aplicar el voltaje de 300.
Este experimento fue muy revelador porque mostró que estadounidenses comunes presionados por una autoridad preferían seguir estas órdenes aun cuando se notaba que no estaban de acuerdo.
Me gustó mucho este experimento, pues tiene relación con lo que Freud hablaba, nuestro libre albedrío no lo aplicamos siempre que queremos, muchas veces somos controlados por fuerzas externas e internas que escapan de nuestro control, por lo que esta capacidad de poder tomar tus decisiones cómo y cuándo quieras no es del todo cierta, y esto lo demuestra un poco.
Aquí les dejo un vídeo que habla sobre este tema: Experimento de Milgram
Espero les allá gustado, nos vemos la próxima.